Esta será, sin duda, la frase más escuchada del viaje. Es la frase que nos decía la voz del navegador del cañonero cada vez que nos confundíamos de camino o no hacíamos caso a sus no siempre sabias indicaciones. En general nos ha resultado de gran ayuda pero otras veces... cariñosamente la llamábamos "la guarra" o "la zorra", en función del grado de cabreo que nos produjese.
Tras pasar noche en San José, nos dirigimos ya dirección sur con idea de acabar el día lo más cerca posible de Los Ángeles. Pero primero paramos en Santa Cruz, donde reside un primo de Luis con la idea de desayunar con él. La quedada es en un restaurante brasileño y el desayuno es una fabula. Las camareras están muy bien, en particular hay una increíblemente guapa.
Tras despedirnos del primo de Luis, retomamos el camino hasta Sand, donde paramos en un "Circuit City" (una especie de centro comercial de aparatos informáticos, etc... tipo "Media Markt") con la idea de mirar algunas cosas (un portátil, cámaras, un disco duro externo). Hay un portátil con buena pinta en los papeles de propaganda pero ya se les ha acabado, así que decidimos seguir y parar en algún centro igual (o similar) por el camino (para desesperación de Carlos, que es el único de nosotros que no tienen pensado comprar nada... salvo un pin de la ruta 66, ya difícil de conseguir y en cualquier caso que nos e va a encontrar en un sitio de estos.
Tras pasar noche en San José, nos dirigimos ya dirección sur con idea de acabar el día lo más cerca posible de Los Ángeles. Pero primero paramos en Santa Cruz, donde reside un primo de Luis con la idea de desayunar con él. La quedada es en un restaurante brasileño y el desayuno es una fabula. Las camareras están muy bien, en particular hay una increíblemente guapa.
Tras despedirnos del primo de Luis, retomamos el camino hasta Sand, donde paramos en un "Circuit City" (una especie de centro comercial de aparatos informáticos, etc... tipo "Media Markt") con la idea de mirar algunas cosas (un portátil, cámaras, un disco duro externo). Hay un portátil con buena pinta en los papeles de propaganda pero ya se les ha acabado, así que decidimos seguir y parar en algún centro igual (o similar) por el camino (para desesperación de Carlos, que es el único de nosotros que no tienen pensado comprar nada... salvo un pin de la ruta 66, ya difícil de conseguir y en cualquier caso que nos e va a encontrar en un sitio de estos.
Una vez más en el coche, llegamos a Carmel, donde comienza una famosa carretera californiana que recorre el estado de norte a sur (o viceversa). Se trata de la "Big Sur". Ellos la llaman así porque el primer camino que se hizo por allí lo llamaron "Gran Sur" los misioneros españoles que llegaron a las costas californianas a comienzos del siglo XVIII. Solo han cambiado al ingles la primera mitad del nombre. Para que os hagáis una idea, es la carretera por la que conduce Michael Douglas como un perro en celo en "Instinto Básico" cuando va en busca de Sharon Stone.
La carretera está plagada de curvas y tiene un entorno espectacular. Montañas a un lado y al otro el mar. Desafortunadamente, hay algo de niebla y no podemos contemplar la belleza de los parajes en todo su esplendor.
Finalmente, paramos en un sitio donde había buenas vistas (y algo menos de niebla) para comer y luego continuamos hasta San Luis Obispo, donde termina esta carretera.
En esta ciudad volvemos a la carga con la tecnología. Esta vez paramos en un "Best Buy" pero los precios son más caros, de modo que a pesar de la hora (las 7 de la tarde) decidimos seguir camino hasta Santa Bárbara, donde el navegador nos indica que hay otro "Circuit City" pero tenemos que llegar antes de las 9...
Llegamos a las 20:40 y compramos lo que teníamos pensado, tras lo cual, al llegar al coche hicimos cuentas del despliegue tecnológico que teníamos:
- 2 portátiles.
- 9 cámaras digitales.
- 18 tarjetas de memoria.
- 2 discos duros externos.
- 2 navegadores.
- 2 MP4.
- 1 calculadora científica.
- 5 teléfonos móviles.
- 4 pen-drives.
Vamos... ni en la NASA!!!
- 2 portátiles.
- 9 cámaras digitales.
- 18 tarjetas de memoria.
- 2 discos duros externos.
- 2 navegadores.
- 2 MP4.
- 1 calculadora científica.
- 5 teléfonos móviles.
- 4 pen-drives.
Vamos... ni en la NASA!!!
Ya más relajados todos, reanudamos camino a Los Ángeles hasta llegar a Thousand Oaks uno de los pueblos/ciudades que pertenecen a Los Ángeles o están en su área de influencia. Allí pillamos un motel (un "6", como tantas veces) y cenamos después. Lo cual es bastante raro, pues casi siempre hemos dejado para el final buscar un sitio para dormir.
El viaje se está acabando. Ya solo nos queda ver Los Ángeles mañana y la mañana del día siguiente, pues por la tarde tendremos que tomar los vuelos de regreso a casa. Se nos va a hacer raro no tener hamburguesa y coca-cola para comer o cenar. Lograremos acostumbrarnos y readaptar nuestras vidas a un estilo de vida europeo?
3 comentarios:
Como se ve en la foto, el relax es total...
Edu
Es que se queda uno más relajadito. Por cierto, no comentaste nada en la crónica de los leones marinos.
ni de los coches que vimos!!!!
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